Cristina Pedroche firmó contrato de cadena con Atresmedia y unas semanas después ya se supo que iba a presentar Pekin Express. Se dice que había escuchado cantos de sirena desde Mediaset, pero finalmente se queda en el grupo Antena 3, porque según ella «todo se ha desarrollado de una manera natural y muy bonita». Y creo que hace bien. Muchas veces colaboradores o presentadores cambian de cadena y no funciona. No sé si es porque los espectadores asocian las caras con un canal en concreto, pero son sonados los batacazos después de cambiar, como el de Maria Teresa Campos. Se fue a Antena 3 y tuvo que volver a Telecinco para recuperar el favor del público.
¿Por qué renueva Atresmedia a Cristina Pedroche? Porque es un auténtico talismán para el grupo. Cada vez que aparece en pantalla, sube la audiencia. Ocurre en «Zapeando» donde es colaboradora habitual. También ha sucedido en «El hormiguero«. Y más claramente en «Los viernes al show», donde la utilizan para arañar décimas de share los viernes que el programa es más flojo.
¿Cuáles son sus fortalezas? La principal es la natauralidad, algo muy difícil de ver y conseguir en televisión. Además no tiene vergüenza. Pero una falta de vergüenza, sana. Algunos de los espectáculos que monta en plató quedarían zafios en otras colaboradoras, pero en ella casi siempre resultan graciosos. Para muestra, un botón. En su entrevista con Pablo Motos dijo: «tengo los pezones pequeños» y nadie se ha rasgado las vestiduras.
¿Quién la descubrió? Cristina Pedroche adquirió popularidad como una de las chicas que aparecían en la revista FHM. A partir de ahí se fijaron en ella en «Sé lo que hicistéis» de La sexta y la ficharon para sustituir a Pilar Rubio como reportera de calle. Fijaos dónde está ahora Pilar Rubio, con apariciones testimoniales en «El hormiguero«, y dónde ha llegado «la Pedroche«.
¿Y cuál es su arma secreta? Tenía una herramienta que utilizaba mucho para generar interés entre sus seguidores, sobre todo masculinos. Era ir diciendo que no tenía novio y lo buscaba desesperadamente. Pero finalmente se decubrió el pastel de que mientras hacía esto ya salía con el cocinero dueño de «Diverxo», David Muñoz