Es muy raro ponerse a ver una serie basada en una película. Y màs cuando la peli, en este caso «Fargo«, es tan buena. Te sientas delante del ordenador y piensas que lo más normal es que te defraude. Pero en este caso, sucede lo contrario. La serie conquista. Y se ha convertido en una franquicia tan reconocida, o más, como la versión original. Desde 2014 se han emitido tres temporadas con muy buenos datos de audiencia y ya está confirmada la cuarta.
La fórmula parece sencilla, pero no lo es. Absorben la gélida atomósfera del «Fargo» de los Cohen y meten personajes que habitan entre la ternura y el frikismo. Todo aderezado en cada temporada con uno o dos actores ya reconocidos:
-En la primera Martin Freeman, de “El señor de los anillos” y Billy Bob Thorton . Los dos se salen pero el ex marido de Angelina Jolie interpreta para mi el mejor personaje de toda su carrera. Lorne Malvo da auténtico miedo sin mover siquiera un músculo.
-En la segunda temporada es Kirsten Dunst la que borda su papel de excéntrica peluquera. Mezcla inocencia y maldad de una manera sublime.
-En la tercera encontramos a Carrie Coon, la diva de «The Leftovers», y Ewan Mcgregor en su doble papel de los gemelos Stussy.
Los guionistas no se casan con nadie y como espectador lo aceptas como si fuesen gurús. Son capaces de meter un ovni sin venir a cuento o hacer que uno de los personajes engulla comida para verle a continuación vomitar al estilo romano. Y no pasa nada. Entras en la secta y estás atrapado. Todo ok. Como ese restaurante que te gusta y aunque un día sirvan un plato en mal estado, vuelves al mes siguiente. Así que si os gustó la peli, ya estáis tardando en ver la serie.