La premisa de Westworld me parece brillante. Es crear un parque futurista gigante donde la gente pueda experimentar con sus más bajas pasiones: sexo, violencia o alcohol. Algo parecido a lo que hacen los americanos cuando van a Las Vegas: cometer excesos.

Secuencia de Westworld
Pero Westworld va más allá de una premisa brillante, porque su desarrollo es potentísimo también. Añade a la acción propia del viejo oeste, reflexiones filosóficas. Aunque pueda resultar tediosa por momentos, acaban enganchando. Sobre todo porque quieres ver qué sucede en la mente de esos humanoides que se sublevan contra sus creadores.
Lo bueno es que además ha sabido mezclar dos generos que no suelen funcionar juntos: el western y la ciencia ficción. Por ejemplo “Regreso al futuro 3” lo hizo y fue la película más floja de la saga. Pero aquí todo encaja: por un lado escenas de western inspiradas en las mejores secuencias de Sergio Leone. Y por otro, una especie de «Black Mirror» apocalípitico en el que los millonarios se divierten violando y asesinando.
El casting
Los actores funcionan: a excepción de Dennis Hopper, que da bastante pereza, los demás están muy bien escogidos. Sin duda el trabajo que más atrapa es el de Thandie Newton que interpreta a Maeve: una cara que hemos visto muchas veces pero difícil de ubicar ya que casi siempre ha ejercido roles secundarios: «Crash», «Mision Imposible 2», «Entrevista con el vampiro» o «En busca de la felicidad».
Jimmi Simpson, al que vimos en «USS Callister», de la quinta de «Black Mirror», también está correcto y Antonhy Hopkins lo borda en su ya habitual papel de señor indescifrable.

Thandie Newton, Jimmi Simpson y Anthony Hopkins
Las historias de amor tienen mucho peso. La de Teddy y Dolores. La de Maeve hacia su hija. La de Ford hacia su creacion, el parque. Además «Westworld» juega muy bien con los cliffhanger al estilo de «Perdidos» o «Juego de Tronos». Siempre deja los finales de capítulo en alto para que tengas ganas de ver más.
La música y el futuro de la serie
La banda sonora es espectacular. La podríamos calificar de grunge/melódica y se escuchan versiones de «Nirvana», «Soundgarden» o «White stripes» que ponen los pelos de punta.
Al final y al cabo, se trata de una serie rara, que a veces se hace bola. Pero acabas volviendo porque quieres descubrir qué pasa en ese parque. Así que veremos cómo evoluciona en futuras temporadas porque tiene pinta de que va para largo. ¡Le daremos un voto de confianza!